sábado, 10 de febrero de 2007

Gran minería: Cuestión política inaceptable


Mientras el gobernador de la provincia de San Juan, José L. Gioja sigue diciendo que quienes luchan por el medio ambiente, quienes están en desacuerdo con la gran minería con cianuro, quienes se oponen a la segunda reconstrucción de San Juan son seres trasnochados, que van a contramano de la provincia y son fundamentalistas del medioambiente; mientras los demás políticos que supuestamente son opositores, ya por miedo o por complicidad, permanecen callados y no hay ninguna representación política para los que no creemos la gran mentira oficial; aunque no se vislumbren salidas a esta situación, es nuestra obligación como ciudadanos comprometidos por nuestro pueblo, luchar a toda costa por combatir las ideas y las mentiras oficiales.

Por eso considero oportuno atacar estas mentiras sobre el desarrollo de nuestra provincia en base a la gran minería con cianuro, con las mejores herramientas que poseo, ya que no soy un gran conocedor del medio ambiente, ni geólogo, ni ingeniero en minas ni especialista en regalías mineras. Solo soy un futuro politólogo, y mis armas contra este gobierno son la lógica, los conocimientos aprendidos en la carrera y mis convicciones.

Voy a refutar políticamente estas mentiras, basándome en su principal argumento.

Mentira oficial: La gran minería con cianuro, con los máximos controles de seguridad, es promotora del desarrollo provincial.

Primero: No está justificado bajo ningún aspecto que las riquezas naturales de un pueblo sean arrebatadas pacíficamente, mediante el engaño, por otro pueblo o por una empresa. Ha habido casos en la historia como por ejemplo, los ricos yacimientos de carbón del norte de Alemania que perdió esta durante las dos guerras mundiales, o más cercanamente, la salida al mar que perdió Bolivia durante la guerra del pacífico, con grandes recursos minerales. Es criticable que ambos países perdieran fuentes básicas para su crecimiento y desarrollo. Pero se justifica en un enfrentamiento bélico.

Lo que no tiene justificación es perder recursos materiales de forma pacífica, habiendo la mayoría del pueblo sanjuanino sido engañado por la propaganda de la empresa Barrick y del gobierno de Gioja. La empresa transnacional es como toda empresa de este tipo, salvaje y sin escrúpulos. Pero ¿quién le da de comer al chancho? No sólo será criticado fuertemente en el futuro el actual gobernador, sino que nuestros descendientes nos juzgarán a nosotros también por no haber sabido defender lo que por derecho nos correspondía.

Segundo: Lo más importante. Aún cuando la empresa Barrick y su departamento de comunicación, el gobierno Giojista, nos digan y nos aseguren que la gran minería con cianuro es segura, y aún cuando fuera comprobable científicamente de que no habrá contaminación de ningún tipo, como lo dicen algunos geólogos e ingenieros, políticamente es inaceptable.

¿Por qué es inaceptable políticamente? Porque los riesgos son altos, tanto para el medioambiente como para los habitantes de los valles de Jáchal, Iglesia, Calingasta y Tulum, o sea del 98 % de la población total de San Juan. No puede justificarse bajo ningún punto de vista que el lucro esté antes que la seguridad de la población.

Gioja no puede permitir que el desarrollo ficticio que la gran minería con cianuro desarrollaría arriesgue la vida de todos los sanjuaninos, la nuestra y la de nuestros descendientes. No es justificable bajo ningún aspecto y es condenable totalmente, incluso hasta en el caso hipotético de que existiera verdaderamente un desarrollo económico y social de la provincia.

El Estado es una construcción social, cuya base es preservar la vida de sus integrantes. La seguridad del pueblo siempre debe estar primero, aún cuando esto implique costos materiales altísimos.

Nosotros vivimos en una provincia pobre, dentro de un país subdesarrollado, pero no por eso no merecemos tener los mismos derechos a la seguridad que los habitantes de cualquier país desarrollado.

Eso es lo que no quiere aceptar nuestro gobernador, que ahora tiene en sus manos nuestra vida y la de las futuras generaciones de sanjuaninos.

Diego M. Flores Burgos

Bases del el partido nacional y popular


1. Dios, Relación Iglesia Estado - El partido nacional y popular cree en Dios, fuente última de toda verdad y justicia. Pero propugna la separación total de la Iglesia y del Estado, entendiendo que ambas instituciones poseen esferas de competencia distintas y hasta contradictorias, y que la relación entre ambas sólo beneficia a algunos miembros de ellas y distorsiona los objetivos propios.

2. Propiedad popular, Pueblos originarios - El partido nacional y popular reconoce como propiedad del pueblo los recursos naturales del suelo y subsuelo, como herencia derivada de los pueblos originarios que habitaron estas tierras hasta la llegada de los colonizadores españoles.

3. Intransferibilidad de la propiedad popular - Como los recursos naturales son propiedad exclusiva del pueblo, son intransferibles y el pueblo mismo es quien, sin intermediarios, debe decidir sobre la administración de los mismos.

4. Estado, concepto - El Estado es una construcción humana, cuyo objetivo es promover el desarrollo y bienestar del hombre, no para su explotación o instrumentalización por parte de los poderosos. El Estado es la institución principal de la sociedad, es parte de esta y está en función de ella.

5. Igualdad - El partido considera que los hombres son naturalmente iguales, aunque existan diferencias extra naturales motivadas por cuestiones económicas y sociales. Estas diferencias extra naturales son las que condicionan la vida de los individuos y es labor del Estado reducir estas desigualdades, permitiendo que cada uno desarrolle sus plenas potencialidades, partiendo todos desde las mismas condiciones.

6. Libertad – El individuo es libre cuando puede desarrollar efectivamente sus potencialidades, sus gustos e intereses, siempre que estos no perjudiquen a otros. Pero para ello el Estado debe dar garantías económicas que permitan que cualquier persona pueda ser libre.

7. Democracia – Como el Estado es una construcción de la sociedad, la democracia es método propio del Estado y el que más fielmente representa la voluntad popular. Es, además, una metodología de vida, que para ser efectiva, debe permitir la participación real de todos.

8. Poder Ejecutivo – A fin de que la voluntad popular sea lo más fielmente interpretada y ejecutada, el sistema democrático debe eliminar todos los obstáculos entre el pueblo y el gobierno, siendo lo más directa posible.

9. Poder Judicial – Los magistrados son funcionarios públicos, tienen las mismas obligaciones que cualquier otro ciudadano. El partido considera que los magistrados forman un estrato superior dentro de la sociedad, basado en privilegios tributarios y de diversa índole, en la inamovilidad de sus cargos y en el poder que tienen sobre los individuos y el Estado. Este estrato debe ser desarmado, a fin de que los magistrados sean realmente funcionarios al servicio del pueblo, y no de ellos mismos o de sus amigos.

10. Poder Legislativo – El poder legislativo debe convertirse en la voz del pueblo, en una asamblea donde se debatan los problemas relevantes de la sociedad y no en un órgano al servicio de los caprichos del Poder Ejecutivo.

11. Funcionarios y responsabilidades – El partido nacional y popular considera que la dirección del Estado, la utilización de los recursos públicos y la influencia sobre la vida de las personas, son actos de suma responsabilidad, que requieren la toma de conciencia por parte de los funcionarios sobre las capacidades que se necesitan para ejercer dichos cargos. Los funcionarios de los tres poderes deben responder al pueblo sobre los perjuicios que le causen al Estado, ya sea por acción u omisión y ser juzgados por jurados populares en caso de ser necesario.

12. Discriminación – El partido nacional y popular reconoce que la discriminación política se da principalmente con dos grupos, las mujeres y los jóvenes. El partido, motivado por la igualdad natural de las personas no realiza discriminación alguna. No existen secretarías de la mujer ni de la juventud, todos somos iguales, todos podemos hacer aportes desde distintas ópticas y profundidades. Pero todas igualmente válidas. De la misma manera, el partido considera que medidas tales como el cupo femenino son formas de perpetuar la desigualdad entre los sexos, al igual que el establecimiento de bases de edad para los cargos públicos.

13. Participación política – El partido reconoce como única forma de que la voluntad popular sea escuchada y ejecutada efectivamente mediante la participación político partidaria. Los partidos políticos son los medios a través de los cuales las demandas de grupos o sectores, más o menos representativos, pueden hallar respuestas.

14. Partidos políticos de San Juan – El partido nacional y popular nace del seno de la sociedad, que no encuentra una voz que la represente políticamente, ni mucho menos luche por sus intereses. Consideramos que no hay alternativas políticas hoy en San Juan, que la omisión y el silencio del bloquismo, de la UCR y de los demás partidos provinciales convalidan el régimen impuesto por el Justicialismo provincial.

15. Visión del presidente Kirchner – El partido nacional y popular considera que la Argentina vive un momento decisivo de su historia. Puede continuar con la dependencia económico y cultural externa, con la pobreza y el atraso, o puede rescatar su identidad latinoamericana, lograr la independencia económica, sacar de la pobreza a su pueblo, lograr una sociedad más igualitaria y justa. Vemos en el presidente Kirchner la voluntad de realizar estas últimas metas. Pero también criticamos la lentitud de las reformas estructurales que hacen falta para lograrlas: reformas tributarias, propiedad nacional de los recursos energéticos, reformas en el sistema de justicia.

16. Visión del gobernador Gioja – El partido nacional y popular está totalmente en contra de las políticas provinciales que lleva a cabo José L. Gioja. No comparte la riesgosa explotación minera con cianuro, la extracción de capitales por parte de empresas mineras y de energía. No comparte el lucro presente de algunos, respecto de la actividad de la gran minería, frente a los perjuicios medioambientales de todos los sanjuaninos. No comparte su relación cesaropapista con la Iglesia local, el tratamiento caritativo de la pobreza, el gasto persuasivo de la publicidad oficial, la falta de una política integral de desarrollo a corto y largo plazo, el conservadurismo de sus funcionarios.

17. Integración latinoamericana – El partido pretende que el sueño de los libertadores José de San Martín y Simón Bolívar de una América Latina integrada y unificada se realice. Compartimos rasgos culturales, vivimos las mismas situaciones de esclavitud y explotación por parte de extraños y poderosos, tenemos el mismo deseo de emancipación y libertad. Por ello compartimos los deseos y gestiones integradoras del gobierno venezolano de Hugo Chávez, del boliviano Evo Morales y del presidente de los argentinos, Néstor Kirchner.

18. Íconos partidarios – El partido nacional y popular reconoce como figuras ejemplares y con condiciones a imitar: Manuel Belgrano: por su sacrificio y abnegación, aunque tuvo todo en contra; José de San Martín: Por hacer suyo y concretar un sueño popular; Domingo F. Sarmiento: Por el interés de fundar una nación desarrollada; Hipólito Irigoyen: Porque representó la voluntad popular, frente a los enemigos de siempre; Juan D. Perón: Por procurar la igualdad entre los miembros de la sociedad, la justicia social, el desarrollo autónomo y su capacidad política.